Colbún dentro de su plan estratégico puso como foco el desarrollo de energías renovables. Dentro de ese marco, la promoción de la electromovilidad se convierte en un pilar fundamental del desarrollo de las mismas con miras al futuro de la industria. Heinz Müller, gerente de Productos y Servicios, nos cuenta los beneficios que trae consigo el uso de la movilidad eléctrica por sobre el modelo convencional.

La electromovilidad es un fenómeno tecnológico que toma cada vez más fuerza. Desde la perspectiva de un generador como lo es Colbún, ¿Cuáles son los beneficios de ésta por sobre el transporte convencional?

Creo que los beneficios son muchísimos y están a la vista. En primer lugar, el costo es un ítem a considerar en esta comparación. Si uno compara el costo de uso de un vehículo diésel con uno el eléctrico, el ahorro mensual que genera ocupar un vehículo eléctrico es aproximadamente del 70 – 80%. Esto se puede ligar también a un tema de eficiencia. Un motor eléctrico tiene menores pérdidas que uno convencional.

Otra arista a considerar es la contaminación acústica. Los vehículos eléctricos son silenciosos y contribuirán de manera directa a mitigar la contaminación acústica. Lejos por cierto del nivel de sonido que puede llegar a producir un vehículo que funciona con diésel. Bueno, sin dudas, la huella ambiental es uno de los ejes más relevantes para hacer este análisis.

Tomando ese último punto, ¿Cuál es el principal beneficio en términos ambientales?

La reducción de huella ambiental en el uso de un vehículo eléctrico, comparado a un vehículo convencional, es una cifra más que relevante. Ciertamente las emisiones de un vehículo eléctrico, por sobre uno que emite CO2 es mucho más baja. Sin ir más lejos, existe una diferencia del orden del 70 -80% respecto de emisiones.

¿Cómo se aprecia el panorama general del uso de vehículos eléctricos en Chile?

Me parece que es una tendencia que está tomando y seguirá tomando fuerza. A enero de 2020, según cifras del Ministerio de Energía, existen aproximadamente 800 vehículos eléctricos en el país con más de 140 estaciones de carga pública. Hoy esa cifra ha ido en subida -la cantidad de cargadores públicos ha subido en cerca de un 15%- y creemos será la tendencia de movilización del futuro. Sin ir más lejos, la proyección que hace el gobierno para el año 2025 es que estaremos dentro del rango de los 30 mil a 40 mil vehículos eléctricos.

Desde el punto de vista de Colbún, ¿Cómo se avizora la introducción en el negocio de la electromovilidad?

Creemos que Colbún puede ser líder en esta rama de energías renovables. No solo por la implementación de tecnologías que permitan el desarrollo de electromovilidad, sino que porque a través de efizity, la empresa de soluciones que hoy es parte de Colbún, esperamos entregar herramientas a otras empresas para el desarrollo de la electromovilidad.

En ese sentido, la propuesta de valor de Colbún es ver todo en uno; seleccionamos el cargador, hacemos la instalación haciendo cumplimiento de la norma eléctrica chilena, realizamos las tramitaciones correspondientes con el SEC y hacer el mantenimiento correspondiente. Creemos que, de esa forma, podemos llevar adelante proyectos que estén asociados y ajustados a las necesidades de cada cliente.